El presidente de esta empresa, dedicada por 25 años a capacitar y asesorar en estrategias e innovación de industrias, relata que la posibilidad de ingresar a un parqueadero de autos, y saber inmediatamente si este tiene o no espacio mediante un semáforo, es uno de los ejemplos de una compañía que aplica el concepto de industria 4.0.
Asimismo, explica que un basurero que incluya sensor y que pueda enviar mensajes de “solo se permiten este tipo de desechos” es un ejemplo de una ciudad o gobierno que aplica el concepto de este tipo de industria.
¿Qué es?
Este concepto fue desarrollado por el gobierno alemán en 2010 para referirse al fenómeno de la transformación digital en la industria, que apunta a modificar los procesos de producción y hacerlos más inteligentes, mecanizados y efectivos.
Jörg Zehnle, presidente de la Cámara de Industria y Comercio Ecuatoriano-Alemana, señala: “el concepto de 4.0 es un techo para explicar que en todo hay una interconexión entre las personas, los bienes, las empresas, las fábricas”; es decir, esta idea consiste en la digitalización de los procesos industriales por medio de la interacción de inteligencia artificial con máquinas.
Díaz sostiene que la industria 4.0 fusiona el mundo virtual y la realidad, para conseguir empresas más inteligentes.
También destaca que este termino hace referencia a la estrategia, a la forma de optimizar los procesos para que las organizaciones logren hacer más, utilizando recursos tecnológicos, con el fin de alcanzar más mercados, ya sean estos nacionales o mundiales.
Mariela Cerrada, docente de la carrera de Mecatrónica de la Universidad Politécnica Salesiana de Cuenca, coincide con Díaz. En su opinión, este concepto hace referencia a una estrategia.
La profesora señala que la característica de esta revolución industrial es “la posibilidad de estar interconectados con dispositivos de comunicación” y que través de estos, se pueda recopilar el mayor volumen de datos en torno a la empresa y su desenvolvimiento.
Añade que este avance tecnológico que provee la evolución de los medios digitales, así como del mundo cibernético, ofrece la posibilidad de que cualquiera pueda innovar su propio negocio.
Díaz señala que en el campo de la evolución ya no solamente se debe hablar de cambio, “sino de velocidad del cambio”, ya que aquellos líderes que no aceptan esta realidad están “preparados para un mundo que ya no existe”.
Aplicación
Si bien todos los líderes visionarios deberían ser parte de la evolución de la industria, no se puede hablar de una obligación, “pues la aplicación de este concepto es tal como el manejo de un sistema de gestión”, apunta Diaz. Su adopción debería ser una decisión estratégica de las organizaciones, pues aquellos entes que no se adapten a esta tendencia, ya sean pequeñas, medianas o grandes, “simplemente quedan relegados como obsoletos”.
La profesora Cerrada argumenta que una de las mayores ventajas de implementar este concepto es la posibilidad de trabajar en torno a los volúmenes de datos recolectados en el ciberespacio. Pues tras el análisis de estos, la dirección puede tomar decisiones estratégicas de cambio, por ejemplo, se puede mejorar características que los datos recolectados mostraron y no son 100 por ciento satisfactorios para el público .
Ciudades inteligentes
Cuando se habla por ejemplo de ciudades inteligentes, cuenta Díaz, se refiere a todos los conceptos de tecnología que son aplicados exitosamente a los problemas de las ciudades que son denominadas como “inteligentes”. Apoyadas en estos conceptos, las organizaciones pueden percibir como el mundo se va proyectando; y con base en esto, detectar el escenario desde el que deberían mirar y proyectarse al futuro desde el presente.
Continuidad
Las evoluciones tecnológicas son tan rápidas que el ejercicio de observación permanente es vital para no quedarse atrás en el terreno de la innovación, resalta el ejecutivo de Corporación 3D, pues los procesos tienen que ser continuos en el tiempo para lograr los objetivos.
La investigadora explica que el objetivo de la revolución 4.0 es la optimización continua, y su esencia es el uso de la tecnología para la evolución.
Además añade que no es necesario que una empresa cuente con “tecnología de punta” para ser parte de esta revolución 4.0, basta con tomar la decisión de aprovechar los datos con los que ya se cuentan. (I)
DESTACADO
La sensibilización de la alta dirección es vital, para que desde ahí se de el consentimiento y la apertura para la aplicación de ideas.
EL DATO
2011
fue el año donde se dijo por primera vez el término, en la feria industrial Hanover.
Andrea Muñoz
empresas@eltiempo.com.ec
Fuente: Diario El Tiempo
Fecha: 21 de septiembre, 2018