Cómo el consumo local y de calidad aporta al empleo formal

El empleo es uno de los aspectos más importantes para un país y una persona. No solo porque es su medio para subsistir, sino también porque es una de los pilares sobre el que se sostiene todo el sistema económico. Es por ello, que es importante apoyar a las industrias locales a través del consumo.

En el país, del total de la población de casi 18 millones, el 64,3% forma parte de la población económicamente activa. Por este término se entiende a las personas con edad laboral que cuentan con trabajo o están en búsqueda de uno.

Es importante diferenciar los tipos de empleo que existan. Las personas con empleo adecuado son aquellas que perciben salarios iguales o superiores al salario básico y trabajan 40 o más horas a la semana, mientras que el subempleo o empleo informal, la conforman las personas que perciben un salario inferior al básico y no alcanzan las 40 horas semanales.

Las empresas que forman parte de Mucho Mejor Ecuador, no solo tienen un compromiso con la calidad de sus productos, sino también en la de sus prácticas laborales, es por esto, que desde la huella y sus miembros, buscamos promover el empleo formal por los beneficios que trae consigo.

El empleado, al ser retribuido de acuerdo al salario básico y contar con un mínimo de 40 horas de trabajo, está en capacidad de aportar a un mayor crecimiento económico, ya que cuenta con una seguridad financiera que le permite consumir para mejorar su calidad de vida, con lo que apoya a la industria local, que a su vez cuenta con nuevos recursos para su crecimiento y creación de nuevos empleos.

Otro beneficio, además de reducir la pobreza, es que permite un desarrollo social producto del entrenamiento realizado por las empresas para capacitar, lo que posteriormente se puede traducir en mayor productividad, emprendimientos y diferentes mejoras.

Por último, es importante mencionar que al promover el empleo formal y reducir el informal, se disminuye la brecha que se genera entre los ingresos de trabajadores que forman parte del ser formal y quienes pertenecen al informal.

La Pandemia golpeó en 2020 a muchas empresas, lo que se reflejó en las cifras del empleo formal en la población económicamente activa, que cayó con respecto a 2019 de 38% al 30,8%, sin embargo, en el primer trimestre de 2021 ha subido hasta el 33%, lo que muestra una recuperación.

Otras cifras que reflejan las complicaciones por esta crisis sanitaria son el subempleo y el desempleo. Desde diciembre de 2019 a diciembre de 2020, creció el empleo informal del 56,7% al 63,3%, al igual que el desempleo, que pasó del 3,8% al 5,7%.

Si bien existió un aumento del 6,6% en el subempleo en el último año, es una tendencia que ya venía en aumento en los últimos años. El empleo informal ha crecido desde 2014 (38,9%) hasta la actualidad (63,3%).

Por estas razones es importante apoyar a las industrias locales con el consumo de sus productos y servicios, para que se puedan crear plazas de trabajo formales, que permitan al país obtener los beneficios mencionados anteriormente y mejorar las condiciones de vida de muchos ecuatorianos. 

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